Uno de los lemas de Plus Ultra es ‘Creamos conexiones, unimos personas’. Y es que nuestra mayor felicidad es saber que con nuestro trabajo hacemos realidad los sueños de las personas de conocer lugares nuevos, crear lazos con nuevos continentes y descubrir el mundo más allá del océano Atlántico. También la capacidad de unir familias y es que en muchas ocasiones por fuerza mayor hay que separarse y es apasionante saber que gracias a nosotros, las parejas pueden volver a reunirse, padres e hijos, abuelos y nietos, etc.
Sin embargo, el pasado 28 de junio fuimos un paso más allá y unimos a dos personas en un sentido algo diferente. Todo parecía un vuelo normal para nuestra tripulante de cabina Tamara, pero no sabía que ese vuelo que partía de Madrid con destino a Lima iba a significar mucho más para ella. Su novio Mario le haría una propuesta de matrimonio que nunca olvidaría.
Unos días antes, su pareja se puso en contacto con nuestro equipo. Quería sorprender a su novia y pedirle matrimonio. Su idea era aunar ese momento tan mágico con su pasión, la aviación.
Rápidamente nuestros compañeros tuvieron una idea perfecta: Le haría la pedida de mano en el avión y todo el equipo le ayudaría.
El plan comenzó unos días antes, con sus compañeras, preparando en nuestras oficinas con mucho cariño e ilusión los carteles que le harían la pregunta mágica. La idea era que el equipo sostuviera los carteles, mientras que Mario, el futuro novio, hacia la gran proposición.